domingo, 25 de septiembre de 2016

Escamas

En el momento de la lucha los cortes resbalan en las escamas y el fuego las vuelve negras sin llegar a tocarte la piel. Al final, en la victoria, la gente te felicita y te da palmadas en la espalda, palmadas que no sientes debido a las escamas. Entonces te apartas y con paciencia empiezas a desprenderte de aquello que has usado como armadura. Las escamas grandes pesan como metal entre los dedos y son fáciles de retirar, pero a medida que se van haciendo más pequeñas el proceso se vuelve más lento y tiendes exasperarte. Finalmente quedan aquellas que han servido para cubrir los huecos entre las escamas mayores, unas del tamaño de una uña. Éstas se te adhieren a las yemas de los dedos, a las palmas, a las muñecas incluso. Coges una sola entre dos dedos y al abrirlos ves que no cae, entonces la coges con otros dos dedos y los agitas hasta que logras que se desprenda, pero al lograrlo miras las manos, la ropa, la piel, todas esas pequeñas escamas que antes te han salvado y ahora están acabando contigo. Pruebas a frotar con fuerza una palma contra la otra, notas cómo se te clavan y cómo apenas caen, cómo resbalan al tacto y cómo se incrustan en la piel hasta estar al nivel de ésta, sin sobresalir de tal forma que tienes que arrancarlas clavándotelas por debajo de las uñas de los dedos correspondientes. Y ahí es cuando te dan ganas de salir corriendo, de chocar contra las ramas que encuentres, de frotarte en el barro y de acabar sumergiéndote en una fuente de agua, y sin lugar a dudas lo harías si supieras que eso te librará de ellas, pero bien sabes que no es así. No podrás hacer que las escamas brillantes se despeguen de una forma rápida. Nada de correr y sumergirte porque verás que las escamas aún siguen ahí, anegadas a tu piel. Y mientras flotas sentir que puestas en las yemas te impiden dar brazadas, que las piernas se te hacen pesadas y torpes y que crees ahogarte en un charco donde en realidad solo saltas como un pez vivo que pronto se ahogará.

No hay comentarios:

Publicar un comentario